Envía tu carta a los reyes magos a esta dirección de correos,
para que la misma les sea entregada a sus majestades.
Carta a sus majestades los Reyes Magos de Oriente
Recienteme
nte, se ha podido enviar una embajada del más
alto nivel posible, hasta las tres cortes de Sus Majestades los
Reyes Magos de Oriente, en sus palacios de Europa, Asía y África.
Una primera delegación ha contactado con sus pajes en la ciudad
de Colonia (Alemania), donde algunos de sus colaboradores trabajan.
Así, se puede asegurar que todas las cartas de los
niños que se envíen desde esta página llegará a tiempo hasta los
carteros reales.
A medida que vayamos recibiendo información más amplia de
nuestros embajadores, la misma se irá mostrando en esta página
Los Reyes Magos nos los transmite el Evangelio de Mateo.
Son tres magos de oriente, astrologos que conocían el movimiento de
las estrellas, que responden al nombre de Melchor, Gaspar y
Baltasar, originarios de Asia, Europa, y de África respectivamente.
Realmente su nombre no se decía en español, algunos personas eran
griegos, y los llamaban "Appellicon", "Amerín" y "Damascón", y los
judios les hablaban en hebreo, y les llamaban a "Magalath", "Galgalath"
y "Serakin".

Nacido, pues, Jesús en Belén de Judá en los días del rey
Herodes, llegaron del Oriente a Jerusalén unos magos diciendo:
¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer?
Mateo 2,1-2
Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y
postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron
presentes: oro, incienso y mirra.
Mateo 2:11,
Nuestros Reyes Magos, iban guiándose por una estrella hasta
Belén.
Allí buscaron al Niño Jesús recién nacido y le adoraron,
ofreciéndole oro (el regalo típico para un rey que es humano),
incienso (el regalo típico para una naturaleza divina, como se
utiliza en la iglesia) y mirra (un perfume embalsamador,
representando el sufrimiento y muerte futura de Jesús en la cruz).
Antes de llegar a Belén, encontraron al gobernador Herodes el Grande
en Jerusalén, quien les pidió que de regreso de adorar a Jesús, le
contaran el sitio exacto donde se encontraban José, María y Jesús,
y, así, poder ir él también a adorarle.
En realidad, lo que quería Herodes era darle muerte a Jesús, y por
eso orden�� la matanza de los niños pequeños que habían nacido.
Sin embargo un ángel se apareció a los tres reyes magos y les
advirtió del peligro que corría Jesús si le contaban a Herodes donde
estaba el portal.
Así pues, no volvieron por el mismo sitio después de adorar al niño.

La primera vez que nos enteramos del nombre de los Reyes magos, fue
en la iglesia de San Apolinar Nuovo, en Rávena (Italia), donde hay
una pintura que era el retrato de los poderosos magos.
Eran de las tres razas conocidas en la antigüedad (Asia, África y
Europa).
También se ha sabido que después de la resurrección de Jesús, el
apóstol Tomás los halló en la ciudad de Saba.
Allí los tres Reyes Magos fueron bautizados y consagrados obispos.
Después, algunos de sus pajes, fueron martirizados en el
año 70 y sus cuerpos fueron depositados en el mismo sarcófago.
Su Alteza Santa Elena, traslada el sarcófago hasta la ciudad de
Constantinopla.
Posteriormente, el Rey Federico I Barbarroja, en el siglo XII, los
trasladó a la ciudad de Colonia, en Alemania, donde hoy descansan
con sus coronas.
Debido a la cantidad de peregrinos que empezaron a llegar a Colonia
para adorarlos, en el año de 1.248 se inició la construcción de la
catedral de Colonia, que se tard ms de 600 años terminar.
Algunos pastores, han hablado de que también asistió a la adoración
un cuarto Rey Mago, llamado Artabán, aunque este punto no se ha
podido comprobar.
En España, siempre hemos celebrado conjuntamente la Epifanía del
Señor, y la festividad de los Reyes Magos. Es el día en que los
Reyes regalan obsequios a los niños de todo el mundo, e incluso a
algunos mayores, colocándolos en los zapatos que se hayan colocados.